Prólogo I – Paulo Autuori

Prologar un libro de reconocidos estudiosos e investigadores del fútbol como Israel Teoldo, Júlio Garganta y José Guilherme no es una de las tareas más fáciles.

Como suele decir Júlio Garganta, al fútbol se juega con ideas; al buen fútbol, con buenas ideas; al mal fútbol, con malas ideas y, a veces, sin ninguna idea. Esta sola reflexión nos da una idea del rico contenido desarrollado por los autores a lo largo de esta obra.

La pasión que caracteriza a casi todo lo que tiene que ver con el fútbol es algo fantástico. Sin embargo, cuando el tema central es el juego, el tema merece ser tratado con la percepción de lo complejo que es el juego. Y eso es exactamente lo que hacen los autores. En la medida en que la obra propone una inmersión en la complejidad de la dimensión táctica, más atractivo resulta el tema. Y esto me recuerda a Constantin Brancusi cuando dice que «la simplicidad es la complejidad resuelta».

Así pues, la gran jugada es generar ideas que puedan desarrollar un ambiente que facilite la creación de soluciones para un juego sencillo, pero, sobre todo, con calidad y eficacia. Y todo se desarrolló dentro de una lógica. La lógica interna del juego, una lógica de comprensión. Una lógica que, sin pretender diferenciarse, lo es. Y diferenciada porque, incluso en un universo extremadamente competitivo, hay mucho espacio e importancia para contemplar y salvaguardar, a lo largo del proceso, los aspectos sociales, antropológicos y filosóficos, tan fundamentales a la hora de gestionar personas.

También es diferente porque, al proponer «el juego/entrenamiento de vuelta a los jugadores», implícitamente no deja de considerar la importancia de los partidos de fútbol que se juegan en espacios públicos, como calles, descampados, playas, etc.  En este aspecto, una de las ideas principales se refiere a la libertad propia de estas prácticas lúdicas, donde se permite a los practicantes asumirse como los «verdaderos dueños del juego», no sólo imitando a sus ídolos, tratando de repetir sus expresiones corporales y gestuales, sino sobre todo dentro de un escenario de inagotable creatividad.

En este entorno, los niños y jóvenes aprendían a jugar jugando, captaban el espíritu del juego y actuaban en todas las funciones posibles, desarrollando así sus habilidades motoras, sus capacidades coordinativas, así como los aspectos cognitivos, perceptivos, de atención y de toma de decisiones. Todo ello, al traducirse en un «conocimiento específico del juego», se manifiesta de forma natural, espontánea, lúdica y creativa, resultando cautivadora y dando lugar a la proclamada pasión por el «juego del balón».

Así, en un contexto actual, con gran sensibilidad y dentro de la visión de conjunto, donde se inserta el juego, los autores consiguen en esta obra transmitir un conocimiento profundo en el desarrollo de las habilidades necesarias para su práctica.

Partiendo de un pensamiento sistémico, muestran que un equipo es algo diferente a sus jugadores, que dejan de ser partes aisladas para asumir una unidad con los demás y adquirir así una nueva expresión.

Potenciando el entrenamiento y las formas diferenciadas de evaluación, Israel Teoldo, Júlio Garganta y José Guilherme proponen una nueva forma de preparar adecuadamente a los jugadores y, sobre todo al equipo, la razón del propio juego.

A través de las interacciones, impregnadas de intenciones (comportamientos), los jugadores y el equipo son capaces de materializar las ideas inicialmente propuestas.  De este modo, se potencian con el amplio repertorio adquirido y aplicado sistemáticamente en las sesiones de entrenamiento. Además, se les estimula a pensar qué hacer en los diferentes momentos o fases del juego, permitiendo, dentro de ciertos contextos, tomar las decisiones más adecuadas a las diferentes demandas y de la manera más efectiva posible. Así, se entiende que «la formación es lo que hace el juego que justifica o valida la formación». (J. Garganta).

Pues bien, estos son algunos de los ingredientes que el querido lector encontrará en esta importante obra sobre la pedagogía del fútbol, escrita por tres de los mayores exponentes en esta área del conocimiento y que, sin duda, le hará reflexionar críticamente sobre diversos aspectos de la enseñanza del fútbol, comparando las metodologías tradicionales con las actuales.

¡Disfrute de su lectura!

Paulo Autuori

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